viernes, 4 de julio de 2008

Errabundo

Y en aquel camino en que paseabas
distante, lejano
recorrías tus pensamientos,
tus sentimientos.

Dabas vueltas a las paginas de tu memoria
algunas parecían estar en blanco
pero enseguida se llenaban
de alguna reminiscencia entrometida.

Y la brisa suave
te devolvía a la realidad
pero solo por momentos
ya que tu cabeza volvía al protagonismo.

Y el sol tan suave del invierno
era incapaz de calentar
tu alma fría y triste
casi helada.

Los sonidos que aparecían
se confundían con tus recuerdos
y tus recuerdos se confundían
con tus sentimientos.

Y entonces seguías
caminando
pensando
recordando.

El camino parecía no modificarse.
Parecía ser que cualquier desvío,
curva, subida o bajada
eran imperceptibles.

Puede que en algún momento
levantaste la mirada
y viste algo
que te llamó la atención.

Pero, la mente
tan poderosa
te obligó a llevar tus ojos
nuevamente hacia abajo.

Y si!, este camino,
Y si!, esta vida,
Y si!, esta mente
te pierden.

Pero solo basta
con respirar profundo
caminar hacia delante
con la vista en alto.

Y el camino te llevará.

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